
Para el tratamiento y prevención de la candidiasis, la conducta nutricional es fundamental para reducir el pH y modular la microbiota intestinal y vaginal, reducir la permeabilidad intestinal y de esta manera evitar la proliferación del hongo.
Estas orientaciones te pueden resultar de utilidad
Reducir el consumo de AZÚCAR: Las células de la levadura de la Cándida necesitan de azúcar para construir sus paredes celulares y expandir sus colonias. Cuando consumís dulces estás promoviendo la mayor proliferación del hongo y también su adherencia al epitelio vaginal.
Consumir alimentos con acción ANTIFÚNGICA: ajo, orégano (rico en carvacrol), aceite de coco extravirgen (rico en ácidos grasos decanoico y dodecanoico) y jengibre (rico en gingerol).
En el caso de estar asociado a gases y distensión abdominal, el protocolo Low FODMAPs te puede ayudar (es importante contar con la asesoría de un profesional)
Consumir probióticos: las cepas productoras de ácido láctico reducen el ph.
Mejorar la respuesta de tu organismo al ESTRÉS a través de la actividad física, el sueño adecuado y técnicas de relajación.
Consumir alimentos/suplementos con nutrientes importantes para el sistema inmunológico y la salud intestinal como zinc, Vitamina C, complejo B, arginina, glutamina, vit D y probióticos.
Evitar el consumo excesivo de harinas refinadas, helados, alimentos ultraprocesados, embutidos, alcohol y carne roja.